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Este documento pertenece a un taller de Ética impartido en el Instituto Tecnológico Superior de las Choapas. La unidad 1 se enfoca en el objeto de estudio de la Ética y su sentido sociocultural. La Ética es una disciplina que muestra cómo se rigen las bases de la moral, vinculando la realización del bien con la felicidad y el mal con la infelicidad. La ética está vinculada no solo al ámbito personal sino también al plano profesional. La cultura influye en la formación y el cambio de una sociedad, y la ética adquiere significancia a partir del actuar ético del individuo.
Qué aprenderás
Tipo: Resúmenes
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¿Qué es la ética? La ética es un área de la filosofía que muestra cómo se rigen las bases de la moral vinculando siempre la realización del bien con la felicidad y la realización del mal con la infelicidad y el sufrimiento. La ética es una disciplina teórica que versa sobre lo práctico: la acción, es decir, los hechos. Esta orientación teórica es un marco de reflexión ideal para que todo ser humano tome decisiones de acuerdo al criterio de aquello que es correcto o aquello que es justo. La ética marca las pautas o principios del obrar humano. Sin embargo, conviene puntualizar que la ética también es objeto de debate en sí misma como muestra el hecho de que existen actos humanos sobre los que existe distinto punto de vista. Este es el caso, por ejemplo, del aborto o de la eutanasia. Conviene puntualizar que la ética no solo está vinculada con el ámbito personal sino también, con el plano profesional. Es decir, es muy importante integrar la ética y los valores en el contexto de la empresa para recordar que el factor humano es más importante incluso que la productividad. OBJETO DE ESTUDIO Teniendo en cuenta que a cada ciencia le corresponde un objeto de estudio particular y reconociendo el posible carácter científico de la Ética, su objeto de estudio ya lo hemos mencionado al afirmar la importancia de los valores morales, los cuales están circunscritos a la Moral. Es entonces, la Moral el objeto o tema de estudio de la Ética. La Ética necesita de la Moral para sacar sus conclusiones, para explicarla, para elaborar sus hipótesis y teorías, pero ello no significa que la tarea de la Ética consista en inventar o crear la Moral. La Moral entonces, es inherente al ser humano en la medida en que éste es un ser activo, que despliega su voluntad en la realidad natural y social, en forma consciente, libre y, por lo tanto, responsable. De aquí se sigue que sólo el hombre es un ser moral, dado que en la realidad infrahumana sólo existe la necesidad y el determinismo de las conductas instintivas. Ahora bien, la ética se interesa por este actuar humano desde un punto de vista exclusivo y esencial: la conducta humana en tanto es regida, orientada e inspirada por valores, en tanto actúa según los ejes justo/injusto, debido/indebido.
La cultura es información transmitida por enseñanza y aprendizaje, y no por herencia genética. En su sentido más amplio, la cultura puede considerarse actualmente como el conjunto de rasgos distintivos, espirituales y materiales, intelectuales y afectivos que caracterizan a una sociedad o a un grupo social. Ella engloba, además de las artes y las letras, los modos de vida, los derechos fundamentales del ser humano, los sistemas de valores, las tradiciones y las creencias.1 De acuerdo con lo anterior, una cultura es una comunidad de personas con una tradición que ha sido cultivada a través del tiempo; que comparte una lengua, una historia, creencias, valores y prácticas. Además, sus miembros participan en un proyecto de vida basado en expectativas comunes. Una cultura es continuidad, tradición y así se arraiga en el pasado; pero también es proyecto, elección de fines y valores que orienten la acción colectiva, y así, está orientada hacia el futuro. En este sentido, una cultura no es estática, sino que lleva en sí misma las posibilidades de su propio cambio; por ello, una cultura es un espacio de posibilidades, ofrece a sus miembros distintas elecciones posibles entre la repetición y la innovación. Por otro lado, también se habla de cultura para referirse a un conjunto más amplio que abarca varias culturas o pueblos distintos; por ejemplo, cuando se dice cultura occidental, cultura oriental, cultura cristiana, cultura indígena. En este caso, se consideran algunos rasgos comunes que constituyen las creencias o valoraciones que sirven de base a todas las demás, que pueden presentar variaciones entre los diferentes elementos que forman la “gran cultura” … El sentido sociocultural de la ética adquiere significancia a partir del actuar ético del individuo, un actuar que puede ser: **a) Aceptación, por parte del individuo, de las normas establecidas en una sociedad determinada. Tal aceptación producirse, desde el punto de vista ético, de dos formas:
b) No aceptación de las convenciones establecidas en un orden social determinado: No todos los individuos aceptan las normas establecidas en la sociedad en la que se encuentran. En regímenes democráticos asistimos, casi a diario, a las lógicas discrepancias que ciertos individuos, ciudadanos en este caso, mantienen ante las normas y leyes que del gobierno en el poder se derivan. Y con la misma frecuencia, también, asistimos a las dos posturas más usuales que tales personas utilizan cuando mantienen un cierto o total desacuerdo con las leyes promulgadas: 1) De un lado , las que, haciendo uso de las libertades que todo régimen democrático garantiza, discrepan públicamente, argumentando los motivos por los cuales no les parecen justas o idóneas las pautas de conducta arbitradas en esa comunidad o en ese pueblo, e intentando, con el mismo derecho, transformarlas, ofreciendo para ello las alternativas que consideren más adecuadas para que aquéllas sean a su vez sustituidas. 2) De otro , las que, despreciando las normas de toda convivencia, realizan actos contrarios a la ley, bien individualmente o bien organizadamente. Tal actitud, antidemocrática y egoísta, puede provocar un amplio abanico de consecuencias que van desde la marginación de la ley hasta la forma más inhumana y cobarde de discrepancia como es el terrorismo. c) La tercera postura describe también una de las relaciones que desgraciadamente adoptan algunos individuos ante la sociedad: A nadie se le escapa que existen individuos que intentan sólo y exclusivamente conseguir lo que quieren, y para ello, suelen disfrazarse de personas que aceptan la moral convencional y las normas legalmente establecidas, llegando incluso a utilizar el vocabulario moral al uso, con el fin de conseguir sus fines personales. En el lenguaje figurado se suele denominar a estos individuos “camaleones”, queriendo señalar con ello a personas que, buscando el favor y el interés propio, mudan con facilidad de pareceres y doctrinas. Quizá éstos no suelen ser los más dañinos para la sociedad porque, tarde o temprano, ésta puede detectarlos y localizarlos, pero sea cual fuere el peligro que supongan, no deja de ser ésta una actitud reprochable por todo aquel que se considere o tienda a considerarse una persona honesta.