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Microbiología-tuberculosis abdominal, Tesis de Biología

Es un parcial, explicando que es la tuberculosis abdominal (mycrobacterium) cual es su causa, los síntomas, proceso de daño, los cuidados de enfermermeria

Tipo: Tesis

2024/2025

Subido el 15/06/2025

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emanuel-quispe-5 🇦🇷

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Tuberculosis abdominal
Integrantes:
Emanuel Quispe
Nicol Cardozo
José Mamani
28/05/2025
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Tuberculosis abdominal

Integrantes: Emanuel Quispe Nicol Cardozo José Mamani 28/05/

Introducción La tuberculosis (TB) es una enfermedad infecciosa crónica que ha sido un desafío importante para la salud pública durante siglos. Causada por la bacteria Mycobacterium tuberculosis, la TB puede afectar cualquier parte del cuerpo, pero principalmente se enfoca en los pulmones. Objetivos generales

  1. Describir la etiología y causas de la tuberculosis, incluyendo la bacteria Mycobacterium tuberculosis y los factores de riesgo que aumentan la probabilidad de contraer la enfermedad.
  2. Explicar los mecanismos de infección y el sistema del cuerpo más comúnmente afectado por la tuberculosis.
  3. Presentar las medidas de prevención para reducir el riesgo de contraer la tuberculosis, incluyendo la detección temprana y el tratamiento adecuado.
  4. Describir los tratamiento y medicamentos disponibles para prevenir la tuberculosis, incluyendo la vacuna BCG y sus esquemas de administración,.
  5. Identificar los cuidados de enfermería específicos que deben proporcionarse a los pacientes con tuberculosis, incluyendo la administración de medicamentos, el manejo de síntomas y la educación del paciente y su familia.

Desarrollo ¿Tuberculosis que es? La tuberculosis es una enfermedad infecciosa causada por micobacterias, el complejo del Mycobacterium tuberculosis con gran variedad de cuadros clínicos dependiendo del órgano al que afecte. La tuberculosis (TB) abdominal es una forma de TB extrapulmonar que afecta el tracto gastrointestinal, el peritoneo, los ganglios linfáticos intraabdominales y las vísceras, ya sea individualmente o en combinación. Esta manifestación de TB representa entre el 1 % y el 3 % de todos los casos de TB a nivel mundial y entre el 6 % y el 13 % de los casos de TB extrapulmonar, con tasas que varían según la zona geográfica. La TB abdominal puede surgir por diversos mecanismos, como la ingestión de esputo de TB pulmonar activa, la propagación hematógena o linfática, la propagación directa desde focos infectados o la ingestión de leche cruda con Mycobacterium bovis (ver anexo 1). La región ileocecal y el peritoneo son las zonas más comúnmente afectadas; sin embargo, la tuberculosis abdominal puede afectar cualquier parte del tracto gastrointestinal. Los síntomas son inespecíficos e incluyen dolor abdominal, fiebre, pérdida de peso y cambios en el hábito intestinal, lo que dificulta el diagnóstico y a menudo lo retrasa. Una alta sospecha clínica y el tratamiento antituberculoso temprano son esenciales para obtener resultados favorables, aunque puede requerirse cirugía en caso de complicaciones como obstrucción, perforación o estenosis Etiopatogenia  Aerobio(O2) obligado  Crónicos  No esporulado  Intracelular – macrófagos (peritoneales e intestinales)  Oportunista (sistema inmunológico bajo)  Exigentes (nutrientes)  Bacilos Ácido-Alcohol Resistentes BAAR)  Lípidos con alta resistencia Las micobacterias son bacilos (véase anexó 2) ácido-alcohol resistentes no formadores de esporas y no capsulados, son arobios estrictos y no crecen en ausencia de Oxígeno, de crecimiento lento, requieren largos períodos de incubación (10-20 días a 37ºC de temperatura), son resistentes a la desecación y a la desinfección con productos químicos, probablemente por su alto contenido en lípidos, sensibles al calor húmedo, se destruyen por pasteurización.

La probabilidad de desarrollar tuberculosis como enfermedad es mucho mayor entre las personas infectadas por el VIH, y entre las personas afectadas por factores de riesgo como:  Otras causas de inmunosupresión: terapia con corticosteroides, tratamiento inmunosupresor o quimioterapia, tras el tratamiento con agentes contra el factor de necrosis tumoral (FNT) u otro tratamiento biológico, y pacientes sometidos a diálisis peritoneal ambulatoria continua.  Enfermedades debilitantes crónicas: diabetes mellitus, enfermedades hematológicas y enfermedades pulmonares crónicas, especialmente la silicosis.  Desnutrición, neoplasias de base, cirrosis, alcoholismo.  Pacientes de edad avanzada.  Personas privadas de su libertad y personas institucionalizadas con riesgo de tuberculosis.  Personas que viajan a países con alta incidencia de TB. (son India, Indonesia, China, Filipinas, Pakistán, Nigeria, Bangladesh y la República Democrática del Congo) La tuberculosis abdominal puede ocurrir debido a:  Ingestión de esputo por un paciente con enfermedad pulmonar activa por Mycobacterium tuberculosis  Propagación hematógena desde un foco distante  Propagación linfática a través de ganglios linfáticos infectados  Extensión directa desde un sitio contiguo  Ingestión de productos lácteos infectados con Mycobacterium bovis (particularmente observado con el consumo de leche cruda) Algunos autores han clasificado la tuberculosis abdominal en dos tipos: una forma primaria debida a la ingestión directa de M. bovis y una forma secundaria debida a la propagación de la infección a partir de una enfermedad pulmonar activa. En caso de que el paciente haya ingerido un alimento contaminado con Mycobacterium bovis el desarrollo de este será el siguiente:  Paso 1: Ingesta de alimentos contaminados Una persona ingiere alimentos o líquidos contaminados con Mycobacterium bovis, como la leche o la carne de animales infectados que no han sido pasteurizados o cocidos adecuadamente.  Paso 2: Supervivencia en el tracto gastrointestinal

Las bacterias Mycobacterium bovis pueden sobrevivir en el tracto gastrointestinal, resistiendo la acidez del estómago y las enzimas digestivas.  Paso 3: Invasión de los tejidos intestinales Las bacterias Mycobacterium bovis pueden invadir los tejidos intestinales, incluyendo las células epiteliales y los macrófagos intestinales.  Paso 4: Fagocitosis por macrófagos intestinales Los macrófagos intestinales pueden fagocitar a las bacterias Mycobacterium bovis, intentando digerirlas y eliminarlas. Sin embargo, las bacterias pueden sobrevivir dentro de los macrófagos y evadir la respuesta inmune.  Paso 5: Supervivencia intracelular y replicación Las bacterias Mycobacterium bovis pueden sobrevivir dentro de los macrófagos intestinales y replicarse, lo que puede llevar a la formación de granulomas y daño tisular [necrosis caseosa (ver anexó)]  Paso 6: Diseminación de la infección La infección puede diseminarse a otros órganos y tejidos abdominales, como el peritoneo, los ganglios linfáticos mesentéricos y el hígado. En resumen, la infección por Mycobacterium bovis a través de la ingesta de alimentos es un proceso complejo que involucra la supervivencia de las bacterias en el tracto gastrointestinal y su posterior invasión de los tejidos intestinales. La fagocitosis por macrófagos intestinales y la supervivencia intracelular de las bacterias son clave para la patogénesis de la enfermedad. Sistemas afectados TB pulmonar. La mayoría de los casos de TB son pulmonares. Entre los pacientes con TB extrapulmonar, sólo el 15-20% tiene tuberculosis pulmonar activa concomitante. La tuberculosis pulmonar no está contemplada en esta directriz. TB extrapulmonar. La tuberculosis extrapulmonar puede encontrarse en las siguientes localizaciones: laringe, ganglios linfáticos, pleura, cerebro, riñones, huesos y articulaciones, peritoneo e intestino, meninges, piel y pericardio. Los clínicos seguirán viendo casos, debido al resurgimiento de la tuberculosis que ha tenido lugar desde mediados de los años 80 en muchos países. La tuberculosis extrapulmonar se encuentra con más frecuencia en personas infectadas por el VIH u otros inmunodeprimidos, y en niños pequeños. La tuberculosis abdominal es la única tuberculosis extrapulmonar cubierta en esta directriz. (Ver anexo 3) TB miliar. Una tercera forma de tuberculosis, aunque poco frecuente, es la tuberculosis miliar, una forma de la enfermedad en la que las partículas tuberculosas son diseminadas por todo el organismo a través del torrente sanguíneo. La tuberculosis miliar no está contemplada en esta directriz.

 Tuberculosis del intestino delgado y grueso: La región ileocecal y el íleon terminal (ver anexo6) son sitios comunes de tuberculosis abdominal debido a la abundancia de tejido linfoide y al tránsito relativamente lento del contenido. Se han reportado las siguientes cuatro formas principales: o Ulcerosa: La forma más común es el tipo ulceroso, que generalmente se presenta con úlceras transversales superficiales y es más probable que se observe en el intestino delgado. o Hipertrófica: Esta forma se presenta como una reacción hiperplásica alrededor de la úlcera, lo que produce una masa inflamatoria. Es más probable que se observe en el ciego. o Úlcero-hipertrófica: Puede presentarse una combinación de formas ulcerativas e hipertróficas. o Estenosis fibrosa: la tuberculosis abdominal puede provocar fibrosis y formación de estenosis, lo que resulta en obstrucción intestinal. (Ver anexó 7) La obstrucción intestinal es una complicación frecuente. Puede producirse perforación intestinal (Ver anexo 8). La tuberculosis intestinal y la enfermedad de Crohn presentan características clínicas, radiológicas, endoscópicas e histológicas similares. El diagnóstico se establece mediante biopsias endoscópicas que demuestran la presencia de microorganismos mediante tinciones, PCR o cultivo. (Ver anexo 9)  Tuberculosis rectal y anal: La tuberculosis rectal y anal son poco frecuentes. La hematoquecia es un síntoma común, aunque también pueden presentarse úlceras mucosas, úlceras hipertróficas, abscesos y estenosis. El diagnóstico se basa en la presencia de micobacterias identificadas mediante histología, PCR o cultivo. (Ver anexo 10)  Tuberculosis de órganos viscerales: Puede producirse infección de órganos viscerales, como el hígado, la vesícula biliar, el bazo, el páncreas, los riñones y sus anexos. La diseminación linfohematógena y la propagación contigua de la bacteria entre órganos intraabdominales son mecanismos fisiopatológicos. Los síntomas inespecíficos, como fiebre, malestar general, pérdida de peso, dolor abdominal, ictericia y ascitis, contribuyen al retraso del diagnóstico. Los estudios de imagen suelen mostrar pequeños nódulos miliares debido a la enfermedad diseminada. Con menos frecuencia, se pueden observar lesiones aisladas que representan abscesos tuberculosos.  Tuberculosis peritoneal: La tuberculosis peritoneal suele presentarse junto con otras formas de tuberculosis abdominal y se desarrolla tras la rotura de ganglios linfáticos mesentéricos necróticos o por afectación de órganos contiguos. La reactivación de la tuberculosis latente es el mecanismo fisiopatológico más común de la enfermedad. La ascitis crónica en ausencia de hepatopatía es la manifestación más frecuente. El líquido ascítico puede ser libre, loculado, fibrótico o una combinación de estas características. Las

asas intestinales pueden adherirse y pueden presentarse nódulos peritoneales. Métodos de diagnóstico El diagnóstico de tuberculosis abdominal a través de un examen físico puede ser desafiante, ya que los síntomas pueden ser inespecíficos y similares a los de otras enfermedades. Sin embargo, algunos signos físicos pueden sugerir la presencia de tuberculosis abdominal, como dolor abdominal, ascitis (acumulación de líquido en el abdomen), organomegalia (aumento de tamaño de órganos) y masas abdominales. (Ver anexo 11) Evaluación general de laboratorio Los pacientes con tuberculosis abdominal sintomática frecuentemente presentan anemia, hipoalbuminemia y niveles elevados de proteína C reactiva (PCR). La PCR, la velocidad de sedimentación globular (VSG) y la calprotectina fecal pueden ser marcadores indirectos útiles para monitorizar la cicatrización durante el tratamiento antituberculoso (TTA). El análisis del líquido ascítico puede ser valioso para sugerir un diagnóstico. El líquido ascítico debido a peritonitis tuberculosa generalmente contiene altas concentraciones de proteínas y linfocitosis. Además, el análisis citológico y los cultivos del líquido ascítico pueden ayudar a descartar otras causas de peritonitis. Se debe realizar una radiografía de tórax para evaluar a los pacientes en busca de evidencia de tuberculosis pulmonar activa y latente. Pruebas específicas para micobacterias  La tuberculosis abdominal es una enfermedad paucibacilar (ver anexo 12). Las tinciones y cultivos de BAAR tienen baja sensibilidad y alta especificidad; la PCR puede proporcionar una mayor sensibilidad.  Las pruebas cutáneas de tuberculina y los ensayos de liberación de interferón gamma (IGRA) pueden ser falsos negativos y no son útiles para establecer un diagnóstico de tuberculosis activa. [31]  Los niveles elevados de adenosina desaminasa (ADA) en el líquido peritoneal son un buen marcador diagnóstico y respaldan el diagnóstico de tuberculosis peritoneal. Estudios de imagen Tomografía computarizada La tomografía computarizada (TC) es la modalidad de elección para evaluar la extensión y el tipo de tuberculosis abdominal. La tuberculosis intestinal puede presentar un engrosamiento asimétrico de la pared del íleon terminal, el ciego o las válvulas ileocecales, asociado a ganglios linfáticos necróticos. Tras una inflamación crónica, el ciego puede presentar un aspecto pequeño e irregular debido a la fibrosis y la estenosis. La afectación de órganos sólidos se manifiesta como múltiples nódulos pequeños hipoatenuantes en la superficie y

La tuberculosis abdominal en sí misma no es contagiosa en el sentido clásico, es decir, no se transmite directamente de persona a persona a través del contacto físico o la proximidad. Sin embargo, la tuberculosis abdominal puede ser causada por la bacteria Mycobacterium tuberculosis, que se transmite a través de la inhalación de aerosoles infectados que contienen la bacteria. Esto significa que la tuberculosis pulmonar es contagiosa, y si no se trata adecuadamente, puede diseminarse a otros órganos y tejidos, incluyendo el abdomen. Entonces el riesgo de transmisión de la tuberculosis abdominal es bajo, ya que la bacteria no se encuentra en grandes cantidades en el tracto gastrointestinal o en las heces. Sin embargo, es importante tomar medidas de precaución para evitar la transmisión de la tuberculosis pulmonar, que puede ser contagiosa. ¿Qué medidas deben tomarse para la prevención y el control de la Infección tuberculosa?

  • Medidas de control administrativas que se deben adoptar cuando existe un alto grado de presunción clínica de tuberculosis: las personas con tos deben separarse rápidamente de las demás, investigarse de inmediato y comenzar el tratamiento si se diagnostica la tuberculosis. Todos los entornos donde se diagnostica la tuberculosis deben tener un plan de control y prevención de infecciones transmitidas por el aire, programas de capacitación y apoyo para el personal y una persona referente o un comité que supervise la ejecución de las diversas medidas de control de infecciones.
  • Medidas de control ambiental. Deben implementarse medidas como la maximización de la ventilación natural, el control del flujo de aire, la filtración y el uso de radiación ultravioleta germicida.
  • Medidas de protección respiratoria personal, que son las de prioridad más baja. No importa cuán efectiva sea, la protección respiratoria personal no puede compensar las deficiencias en los controles administrativos y ambientales. El equipo de protección personal más apropiado para prevenir la exposición a microorganismos es la máscara respiratoria. Las personas con tos deben usar mascarillas quirúrgicas antes de iniciar el tratamiento, para evitar que las secreciones respiratorias lleguen al aire y transmitan los microorganismos. Es decir, garantizar las medidas básicas de higiene de la tos, cubriéndose la boca. (Ver anexo 12)

Normas Mínimas De Bioseguridad La información disponible evidencia contundentemente que el personal de salud con mayor riesgo de contraer tuberculosis es el que asiste directamente al paciente particularmente médicos, enfermeras, personal que recibe la muestra de los pacientes. Es menor el riesgo del personal que se desempeña dentro del laboratorio. Ningún elemento de protección es tan necesario como la información, la organización en el trabajo, la concentración, el estado de alerta y la implementación de medidas de precaución muy simples y de poco costo. Información y monitoreo médico del personal de laboratorio  Los trabajadores de salud infectados con VIH, con otra enfermedad inmunosupresora, con tratamientos prolongados con medicamentos inmunosupresores o diabéticos deberán ser reasignados fuera de las áreas de alto riesgo del laboratorio de tuberculosis. Los que padecen enfermedades pulmonares crónicas deben contar con autorización de su médico para ser incorporados a las tareas del laboratorio.  En el momento de ingreso, el personal deberá ser claramente instruido acerca de cómo se transmite la tuberculosis y las medidas de bioseguridad que deberá aplicar en su trabajo cotidiano. Para ello, el laboratorio debe contar con un documento escrito que el personal debe leer. Debe ser evaluado el grado de comprensión, registrada la evaluación y archivada en su hoja de vida.  Son necesarias reuniones periódicas con todo el personal de laboratorio, destinadas a recordar las medidas de bioseguridad, analizar si se están cumpliendo con regularidad, dilucidar las causas de los accidentes que pudieran haberse producido y realizar las correcciones que fueran necesarias en la rutina de trabajo  Los laboratoristas deben ser incorporados a un programa regular de vigilancia de salud para los trabajadores de laboratorio, siguiendo la normativa vigente por el Programa Nacional de Control de Tuberculosis.  Esta normativa consiste en una evaluación médica clínica anual sistemática con placa de tórax. A los Sintomáticos Respiratorios realizar baciloscopía y cultivo.  Además, se debe realizar prueba tuberculínica al ingreso al establecimiento de salud. En caso de obtener un resultado negativo repetirla 1-2 semanas después de la primera lectura. Si persiste negativa realizar controles anuales para evaluar viraje tuberculínico.  Se debe indicar quimioprofilaxis en aquellos trabajadores de la salud que presenten viraje tuberculínico en el control anual, después de descartar la enfermedad activa.  Cada laboratorio debe contar con instrucciones escritas y difundidas sobre el manejo de pacientes con tuberculosis y de las muestras

 No ubicar en el área de trabajo elementos innecesarios ni sacar de la misma, libros de registro o elementos allí utilizados.  Utilizar siempre guardapolvo de mangas largas y cerrado, preferentemente batas con puños cerrados y sin aberturas en la parte anterior; no sacarlo del servicio de salud, donde debe ser lavado y desinfectado (con agua caliente y enjuague con agregado de hipoclorito).  Los barbijos deben estar disponibles en un área adyacente al laboratorio, para el caso de accidente. Tanto para el caso de accidente como para el caso en que se decida emplearlos en forma rutinaria, se deberá asegurar que:

  • Los barbijos tengan filtrado de alta eficiencia (HEPA) N 95 con certificación de una agencia de seguridad laboral (como el Instituto Nacional de Salud y Seguridad Ocupacional de EE UU, NIOSH). Los barbijos de cirugía no son adecuados
  • El personal esté entrenado para la buena colocación, ajuste y uso de barbijos como elemento de protección, y en la forma de guardarlos adecuadamente, si son reutilizados (sin tocar con las manos la parte interior que apoya sobre la boca, sin aplastarlos, envueltos en una toalla de papel o dentro de una bolsa de papel, pero no en bolsas plásticas que retienen la humedad, en lugar limpio y seco).  Usar guantes para manipular muestras biológicas; tener presente que las muestras pueden contener otros microorganismos, además de micobacterias, incluyendo el virus de hepatitis B, C y/o el de VIH. Entrenar al personal sobre el uso adecuado de guantes como elemento de protección para que no sean elementos de dispersión de contaminación. Controlar que no haya heridas o escoriaciones en las manos, si existen cubrirlas con vendaje y doble par de guantes  Lavarse las manos con frecuencia, aun cuando se usen guantes.  No tocar instalaciones, material de escritorio o equipamiento del laboratorio sin antes quitarse los guantes y lavarse las manos.  No introducir en la boca, por ningún motivo, ningún elemento utilizado o existente en el laboratorio. Al finalizar la tarea, desinfectar las superficies de mesadas donde se realizaron los extendidos y donde se apoyó recipientes con material potencialmente infeccioso. Manipulación y uso de desinfectantes Para la desinfección de superficies se aconseja el hipoclorito de sodio al 1%. Sólo para la limpieza del piso se puede utilizar el hipoclorito al 0,1%. La lejía o lavandina de uso doméstico de buena calidad contiene hipoclorito de sodio en una concentración que varía entre el 3 y 6%. Así por ej., si se parte de una que contenga 5%, se prepara cada concentración mezclando:

 Solución de hipoclorito de sodio 1%: 1 parte de lejía más 4 partes de agua.  Solución de hipoclorito de sodio 0,1%: 25 ml de lejía por cada litro de agua. Mantener la lejía al abrigo de la luz, en lugar seco y fresco y con tapa bien cerrada para evitar que se deteriore. En los envases figura la fecha de envasado, debe ser controlada al adquirirla. Las diluciones de hipoclorito deben ser hechas inmediatamente antes de utilizar el desinfectante porque la dilución pierde actividad con el paso del tiempo. Para la preparación y uso de estas soluciones antisépticas se recomienda tener en cuenta lo siguiente:  Manipular con mucho cuidado el fenol. Es una sustancia corrosiva. Mantener el fenol acuoso en frascos con cierre hermético, en un lugar fresco, al abrigo de la luz y preferentemente en un lugar de almacenamiento alejado del área de trabajo.  Mantener el fenol al 5% al alcance de la mano, en frascos con cierre hermético que evite que se escapen vapores.  Evitar el contacto directo del fenol con la piel o mucosas. Utilizar guantes para manipularlo.  Reducir los vapores de fenol que se desprenden de la fucsina ubicando la tinción de los extendidos en un área bien ventilada y limitando el número de extendidos a colorear a 12. Manipulación de otras sustancias químicas  Manipular con mucho cuidado los ácidos concentrados. Agregar siempre el ácido al agua y no al revés.  No utilizar alcohol cerca de la llama del mechero para evitar que se prenda fuego y posibles quemaduras. Procedimientos frente a un accidente de trabajo  Aunque no es necesario utilizar respiradores para realizar baciloscopías, estos deben estar disponibles en caso de accidente.  Ante cualquier rotura de envases o salpicadura con material potencialmente infeccioso, la persona más entrenada presente debe:

  • Hacerse retirar de inmediato a todo el personal del área.
  • Ponerse el barbijo ubicado en un área contigua al laboratorio (si no está siendo utilizado en forma rutinaria) e ingresar al área laboratorio de baciloscopía.
  • Cubrir inmediatamente la zona del derrame con papel y embeberlo con fenol al 5% o, si el derrame con material orgánico no fuera muy importante, con hipoclorito de sodio al 1%.

¿Cómo se trata la tuberculosis? La tuberculosis se trata con antibióticos. Los fármacos más importantes para el tratamiento de la tuberculosis sensible a medicamentos son isoniacida (H), rifampicina (R), pirazinamida (Z) y etambutol (E). Estos están disponibles en combinaciones de dosis fijas que pueden contener dos, tres o cuatro medicamentos contra la tuberculosis en un solo comprimido, de la siguiente manera:  Rifampicina con isoniacida (RH)  Rifampicina con isoniacida y pirazinamida (RHZ)  Rifampicina con isoniacida y etambutol (RHE)  Rifampicina con isoniacida, pirazinamida y etambutol (RHZE) En general, se prefieren las combinaciones de dosis fijas porque reducen la cantidad de pastillas o comprimidos que se deben tomar cada día. Es muy importante verificar la fecha de caducidad registrada y organizar el suministro de los medicamentos de acuerdo con el método «primeros en caducar, primeros en salir. Se debe restringir el uso de rifampicina para otras enfermedades que no sean producidas por micobacterias, para prevenir que surjan resistencias en la comunidad. Para evitar la aparición de resistencias a los medicamentos contra la tuberculosis, estos deberían dispensarse solo por conducto de los mecanismos de los PNTs. Las dosis recomendadas para cada medicamento se calculan por kilogramo de peso y se han acordado a escala internacional. ¿Cuáles son las opciones de tratamiento de la tuberculosis resistente? El actual régimen acortado estandarizado se puede ofrecer a las personas con tuberculosis resistente sin antecedente de tratamiento previo con medicamentos de segunda línea o a aquellas que son sensibles a fluoroquinolonas e inyectables de segunda línea (se recomienda realizar el LPA para medicamentos de segunda línea). El régimen acortado contiene moxifloxacina, pirazinamida, etambutol y clofazimina a lo largo de toda la duración del tratamiento. Como se muestra en la tabla, esta combinación de medicamentos se complementa con amikacina, isoniacida y protionamida durante la fase intensiva de 4 meses, que puede prolongarse si la baciloscopia del esputo a los 4 meses es positiva y hasta que los exámenes mensuales de esputo sean negativos (duración máxima: 6 meses). La fase de continuación se ha fijado en 5 meses, independientemente de la duración final de la fase intensiva.

Si no hay respuesta bacteriológica y el estado clínico del paciente no mejora al sexto mes de tratamiento, es probable que este esté fallando. Se debe repetir en ese momento el LPA para medicamentos de segunda línea. Si el LPA no se realizó al inicio del tratamiento, debe hacerse ahora para detectar posibles resistencias a fluoroquinolonas, inyectables de segunda línea o ambos. Debido a que este régimen contiene un inyectable que puede causar pérdida auditiva, la audiometría debe realizarse al inicio y mensualmente mientras dure su administración. Si se detecta pérdida auditiva o insuficiencia renal, el inyectable se debe cambiar por cualquiera de los siguientes medicamentos: bedaquilina, delamanid o linezolid. Hay más detalles disponibles en la Guía de práctica de la Unión para el manejo de la tuberculosis resistente. ¿Cómo se trata la tuberculosis en los niños y los adolescentes? El régimen de tratamiento de primera línea en niños y adolescentes es el mismo que el recomendado para adultos. Los niños con formas graves de tuberculosis como meningitis o tuberculosis osteoarticular deben tener una fase de continuación prolongada que comprende 10HR. Los niños suelen tolerar bien los medicamentos antituberculosos y el etambutol se puede administrar de forma segura en niños de todas las edades en las dosis recomendadas. Es importante que los PNTs ofrezcan tratamiento contra la tuberculosis en niños pequeños (<25 kg) utilizando formulaciones pediátricas según las pautas de dosis ajustadas al peso citadas a continuación. Estas formulaciones proporcionan tratamiento en las posologías recomendadas (en mg/kg de peso), son dispersables en agua y tienen sabor a frutas. Por lo tanto, las dosis son más fáciles de administrar a niños pequeños y con menos riesgo de errores en