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Evaluación de la sarcopenia en pacientes hospitalizados, Monografías, Ensayos de Nutrición

Un estudio sobre la prevalencia de sarcopenia en pacientes hospitalizados mayores de 65 años. La sarcopenia se define como la pérdida de masa y fuerza muscular relacionada con la edad, lo que puede tener un impacto negativo en la salud y la calidad de vida de los pacientes. El estudio busca evaluar la prevalencia de sarcopenia en esta población, así como identificar posibles factores de riesgo y marcadores antropométricos que puedan facilitar su detección temprana. Se recopilan datos sobre variables demográficas, clínicas, nutricionales y funcionales de los pacientes, con el objetivo de determinar la relación entre la sarcopenia y diferentes parámetros. Los resultados de este estudio podrían contribuir a mejorar la identificación y el manejo de la sarcopenia en el entorno hospitalario, lo que podría tener implicaciones importantes para la atención y el pronóstico de los pacientes mayores.

Tipo: Monografías, Ensayos

2021/2022

Subido el 03/05/2024

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Trabajo!de!investigación!
Departament!de!Medicina!–!Hospital!Vall!d´Hebrón!
Autor:!Pedro!Moral!Moral!
Director:!Antonio!San!José!Laporte!
Convocatoria!Septiembre!!2013!
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Estudio sobre prevalencia de la sarcopenia en

una unidad hospitalaria de pacientes crónicos

Trabajo de investigación

Departament de Medicina – Hospital Vall d´Hebrón

Autor: Pedro Moral Moral

Director: Antonio San José Laporte

Convocatoria Septiembre 2013

INDICE

    1. RESUMEN Y PALABRAS CLAVE…………...
    • 2.1 Concepto de sarcopenia ………………………… 2. INTRODUCCIÓN
    • 2.2 Otros conceptos …………………………………….
    • 2.3 Epidemiología ……………………………………….
    • 2.4 Fisiopatología ………………………………………...
    • 2.5 Categorías y estadíos ……………………………...
    • 2.6 Métodos de evaluación …………………………...
    • 3.1 Objetivo principal …………………………………. 3. OBJETIVO
    • 3.2 Objetivos secundarios ……………………………
    • 4.1 Tipo de diseño ………………………………………. 4. MATERIAL Y MÉTODOS
    • 4.2 Criterios de inclusión y exclusión ……………
    • 4.3 Cálculo del tamaño de la muestra ……………
    • 4.4 Método de recogida de datos
    • 4.5 Aspectos éticos ………………………………………
    • 4.6 Estrategia de análisis estadístico …………….
    1. RESULTADOS ……………………………………
    1. DISCUSIÓN ………………………………………..
    1. CONCLUSIONES ………………………………...
    1. BIBLIOGRAFIA …………………………………...
    1. ANEXOS ……………………………………………..

2. INTRODUCCIÓN

2.1 Concepto El término “sarcopenia” procede etimologicamente del griego “pérdida de carne” siendo la palabra “sarx” , carne, y la palabra “penia” , pérdida. El concepto fue inicialmente acuñado por Irwin Rosenverg en 1989 con el objetivo de describir el descenso de la masa muscular esquelética relacionada con la edad^1. Esta pérdida de masa muscular ocurre con el paso de los años (sarcopenia primaria), incluso en ancianos que realizan una actividad física intensa^2. Ya desde el año 1931, Macdonald Critchley, neurólogo del King´s College Hospital de Londres describía que “toda la musculatura, con el envejecimiento, tiende a involucionar.”^3 Fue a finales de los años 70 cuando Nathan Shock describió el progresivo deterioro fisiológico que se producía con el paso de las décadas en las distintas funciones corporales concluyendo que “ningún decaimiento de la estructura y función es más dramática que la pérdida de masa muscular relacionada con la edad”.^4 Según datos derivados de estudios transversales se sabe que la potencia muscular en el ser humano tiende a alcanzar un pico máximo entre la segunda y la tercera décadas de la vida manteniéndose hasta los 40-­‐50 años. A partir de entonces empieza a disminuir a razón de 1 a 2% por año^4 entre los 50 y los 60 años, y posteriormente del 3% cada año. A la definición original de Rosemberg ( “pérdida de masa muscular asociada al envejecimiento” ) se fueron asociando con el paso de los años nuevos matices como la involuntariedad de la pérdida, la repercusión funcional y económica…Aún así, todavía no se había conseguido un concepto universalmente aceptado y que tuviera una aceptable aplicabilidad clínica ya fuera en el ámbito asistencial o en el de la investigación. Con el objetivo de elaborar un concepto de consenso se constituyó en 2010 el Grupo de Trabajo sobre Sarcopenia en Personas de Edad Avanzada (EWGSOP) consiguiendo construir una definición clínica práctica y unos criterios diagnósticos de consenso de la sarcopenia relacionada con la edad^5 : la sarcopenia es un síndrome que se caracteriza por una pérdida gradual y generalizada de la masa muscular esquelética y la fuerza con riesgo de presentar resultados adversos como discapacidad física, calidad de vida deficiente y mortalidad^6.

Por otra parte, la definición exclusiva de sarcopenia considerando tan solo la masa muscular es demasiado limitada y podría no tener una utilidad práctica real dado que la fuerza muscular no depende exclusivamente de la masa muscular y no parece existir una relación lineal entre ellas^7. De este modo, el EWGSOP recomienda utilizar la presencia de una masa muscular baja y una fuerza muscular o rendimiento muscular deficientes para diagnosticar la presencia de sarcopenia. Por tanto, para establecer el diagnóstico será necesario la confirmación del criterio 1 así como el criterio 2 o 3 (TABLA 1). Diagnóstico de sarcopenia: criterio 1 + (criterio 2 o criterio 3)

**1. Masa muscular baja

  1. Menos fuerza muscular
  2. Menor rendimiento físico** Tabla 1. Criterios diagnósticos sarcopenia 2.2 Otros conceptos Es importante diferenciar la sarcopenia de otros síndromes que asocien una importante atrofia muscular y que pueden incluir a la propia sarcopenia como uno de sus criterios diagnósticos. La importancia de esta diferenciación radica en promover la investigación de los diferentes procesos fisiopatológicos y de este modo orientar un tratamiento dirigido y adecuado en cada caso. La caquexia (etimológicamente del griego “cac” o mala y “hexis” o condición) ha sido definida como un síndrome metabólico complejo asociado a una enfermedad subyacente (cáncer, EPOC, insuficiencia cardiaca…) y que se caracteriza por una consunción grave y una pérdida muscular con o sin pérdida de masa grasa^8. Por otra parte, se suele asociar a inflamación, resistencia a la insulina, anorexia y un aumento del catabolismo proteico^9. Por tanto, la mayoría de pacientes caquécticos también tienen sarcopenia , mientras que a la mayoría de pacientes sarcopénicos no se los considera caquécticos. La fragilidad es un síndrome geriátrico que aparece como consecuencia de deterioros acumulativos relacionados con la edad, de varios sistemas fisiológicos (incluido el muscular), con alteración de la reserva homeostática y disminución de la capacidad del organismo de soportar el estrés, lo cual hace incrementar la vulnerabilidad a resultados de salud adversos como caídas, hospitalización, institucionalización y mortalidad. Según Fried y cols, tres o más de las siguientes características respaldarán el diagnóstico de fragilidad: pérdida de peso involuntaria, agotamiento, debilidad, velocidad lenta de la marcha y baja actividad física^10. La fragilidad y la sarcopenia se superponen, la mayoría de las personas de edad avanzada frágiles presentan sarcopenia y algunas personas de edad avanzada con sarcopenia también serán frágiles. De este modo, el concepto de fragilidad va más allá de los aspectos físicos abarcando factores psicológicos y sociales como el estado cognitivo y el apoyo social.

2.4 Fisiopatología

Se ha demostrado la relación de múltiples factores con la aparición de sarcopenia. Es importante conocer esos factores y las relaciones existentes entre ellos para poder plantear posibles tratamientos y medidas preventivas contra el desarrollo de la misma. Las conductas relacionadas con los estilos de vida como los malos hábitos dietéticos, el sedentarismo o el tabaquismo junto con los factores genéticos, podrían ayudar a justificar el origen de la sarcopenia. Los cambios hormonales y de citoquinas relacionados con la edad también contribuirían, al actuar sobre mecanismos como el estrés oxidativo, el recambio de las proteínas musculares, la pérdida de motoneuronas alfa y la apoptosis. 2.4.1 Sedentarismo Origina una importante pérdida de fuerza y masa muscular a cualquier edad, según lo demuestran los estudios de reposo en cama. Realizar actividad física (sobretodo ejercicios de resistencia)^16 puede ayudar a prevenir la aparición de sarcopenia, combinando una mejoría en el volumen y calidad de la masa muscular, además de su inervación y del patrón de activación de las motoneuronas. En la población anciana, la respuesta anabólica al ejercicio está disminuida debido probablemente a una menor activación de la ruta sensible a rapamicina ( mTORC 1, mammalian target of rapamycin complex )^17. 2.4.2 Pérdida de función neuromuscular Durante el proceso de envejecimiento tiene lugar una progresiva pérdida de axones de las alfa-­‐motoneuronas. La afectación es mayor en las extremidades inferiores, ya que para llegar hasta allí los axones tienen que ser más largos. También se ve afectado el acoplamiento neuromuscular (a nivel de placa motora). Por otra parte, se ha observado una desmielinización segmentaria, pero su papel en el desarrollo de la sarcopenia parece ser menor. La formación de nuevas fibras a partir de las células progenitoras miogénicas (células satélite) también disminuirá. Por tanto, también se verá dificultada la regeneración del tejido muscular tras cualquier tipo de daño. Por otra parte, y también en relación con el proceso de envejecimiento, se perderán de manera progresiva en torno a un 20-­‐50% de las fibras musculares del tipo II (rápidas, de metabolismo glucolítico) y no tanto las del tipo I (lentas, de metabolismo oxidativo), de las que se perderán en torno a 1-­‐25%^16.

2.4.3 Alteraciones endocrinológicas Las alteraciones hormonales relacionados con la edad y el envejecimiento juegan un papel fundamental en la pérdida de masa muscular, pero existen numerosas controversias sobre los efectos concretos de cada una de las hormonas y su relación con las demás. La insulina estimula selectivamente la síntesis proteica en las fibras musculares, siendo menos efectiva esta actividad anabólica en la célula del paciente anciano. En este tipo de pacientes, se ha descrito una mayor resistencia a la insulina, y el aumento del porcentaje de grasa corporal e intramuscular presente en la sarcopenia se relaciona también con un mayor riesgo de resistencia a la insulina. El ejercicio físico aeróbico y adaptado a cada paciente podría ser una buena medida tanto preventiva como terapéutica en este aspecto^16. Existen resultados contradictorios sobre el efecto de los estrógenos. Su pérdida progresiva con la edad , y especialmente tras la menopausia, se asocia a un aumento en los niveles de citoquinas proinflamatorias que estarían relacionadas con el desarrollo de sarcopenia^18. Sin embargo, los distintos estudios en los que se administran estrógenos no han evidenciado un claro beneficio a nivel de masa o fuerza muscular^19. Los niveles de hormona del crecimiento (GH) y del factor de crecimiento IGF-­‐ 1 también disminuyen con el envejecimiento y su aporte exógeno ha mostrado en diversos estudios que potencia el anabolismo proteico y la masa muscular, pero sin un claro efecto en la fuerza si no se añade un entrenamiento específico^19. Los niveles de testosterona también disminuirán de manera fisiológica, tanto en números absolutos como en su fracción libre. Sin embargo, tampoco existen resultados claros sobre la efectividad de la administración de testosterona a ancianos que no sean deficitarios en ella^19. Algo similar sucede con la dehidroepiandrosterona (DHEA) , cuya suplementación aumenta los niveles de testosterona y de IGF-­‐1, pero sin un claro aumento de el asa, fuerza o función muscular^16. Con el progresivo envejecimiento , los niveles de la 25(OH) vitamina D van decayendo, pudiendo asociar aun aumento de los niveles de parathormona (PTH). Ambas han evidenciado su relación con la sarcopenia, por tanto se recomienda medir los niveles de 25(OH)vitamina D en cualquier anciano con sarcopenia, suplementar si los niveles son deficitarios^16. Finalmente, el aumento de las citoquinas inflamatorias en patologías como el cáncer, la insuficiencia cardiaca o la bronquitis crónica se ha asociado con una disminución en el peso corporal y de la masa magra^16. Por otra parte, en el proceso de envejecimiento el aumento de citoquinas como la IL-­‐1 o la IL-­‐6 es más crónico y gradual, desequilibrando el ciclo de síntesis de tejido muscular hacia un aumento de la proteólisis. Especialmente interesante es el papel de la IL-­‐6, ya que puede actuar tanto como una citoquina proinflamatoria como antiinflamatoria. En este último caso, parece que sería la sintetizada en el propio músculo como respuesta al ejercicio, causando lipolisis e inhibición del factor de necrosis tumoral alfa (TNF∝). El TNF∝ estimula la pérdida de masa muscular al activar la vía de la apoptosis^20.

2.5 Categorías y estadíos

La sarcopenia es una enfermedad con muchas causas y resultados variables. Aunque se observa principalmente en personas de edad avanzada, también puede aparecer en adultos más jóvenes. En algunos pacientes podrá identificarse una causa clara y única de la sarcopenia pero en otros no podrá identificarse una causa evidente a parte del propio envejecimiento. Por tanto, las categorías de sarcopenia “primaria” y “secundaria” pueden ser útiles en la práctica clínica (Tabla 2). En muchos pacientes de edad avanzada, la etiología de la sarcopenia será multifactorial, por lo que no será posible identificar cada caso como afectado por una enfermedad primaria o secundaria^5. SARCOPENIA PRIMARIA Relacionada con la edad Ninguna otra causa salvo envejecimiento SARCOPENIA SECUNDARIA Relacionada con la actividad Reposo en cama, sedentarismo… Relacionada con enfermedades Insuf cardiaca, bronquitis crónica, IRC, neoplasias... Relacionada con la nutrición Malnutrición, malabsorción… Tabla 2 La estadificación de la sarcopenia, como reflejo de su gravedad, es un concepto que puede ayudar a orientar a la hora de seleccionar tratamientos y a establecer objetivos de recuperación adecuados y adaptados a cada paciente. El EWGSOP propone una estadificación conceptual en “presarcopenia”, “sarcopenia” y “sarcopenia grave” (Tabla 3). El estadío de “presarcopenia” se caracteriza por una masa muscular baja pero sin efectos sobre la fuerza muscular o el rendimiento físico. Este estadío solo podría ser identificado mediante técnicas capaces de evaluar la masa muscular (p.eje. bioimpedanciometría). El estadío de “sarcopenia” se caracterizará por una masa muscular baja junto con una fuerza muscular baja o un rendimiento físico deficiente. Finalmente, la “sarcopenia grave” será el estadío que se identificará cuando se cumplan los tres criterios de la definición de sarcopenia (masa muscular baja, menor fuerza muscular y menor rendimiento físico). La estadificación también puede ser una buena herramienta para respaldar el diseño de estudios de investigación que se centren en un estadío concreto o en cambios de estadío a lo largo del tiempo. ESTADIO Masa muscular Fuerza muscular Rendimiento físico Pre-­‐sarcopenia Disminuida Normal Normal Sarcopenia Disminuida Normal o disminuida Normal o disminuida Sarcopenia grave Muy disminuida Disminuida Disminuida Tabla 3

2.5 Métodos de evaluación

Los parámetros para conseguir realizar una correcta evaluación de la sarcopenia son la cantidad de músculo y su función: masa, fuerza y rendimiento físico. El resto consiste en utilizar la técnica más idónea para evaluarlo con la mayor exactitud posible.

2.5.1 Masa muscular

-­‐ Técnicas de imagen Se han utilizado tres tipos de técnicas de imagen para evaluar la masa muscular o masa magra: la tomografía computarizada (TC), la resonancia magnética (RM) y la absorciometría radiológica de doble energía (DEXA). Tanto la TC como la RM son sistemas de diagnóstico por las imágenes de alta precisión capaces de diferenciar la grasa de otros tejidos blandos, lo que las convierte en herramientas de referencia en el contexto de la investigación. Sus principales limitaciones consisten en que es necesario exponer al paciente a las radiaciones ionizantes, el acceso limitado a los equipos en determinados centros y su elevado coste^21. La DEXA es un método alternativo utilizado con fines de investigación y clínico para diferenciar lo tejidos adiposo, mineral óseo y magro. Esta técnica expone al paciente a una cantidad mínima de radiaciones, siendo el principal inconveniente, que el equipo no es portátil, lo que lo descarta como herramienta para estudios epidemiológicos o clínicos a gran escala. -­‐ Análisis de bioimpediaciometría Técnica que calcula el volumen de masa corporal magra y grasa. Es barata, fácil de realizar y muy reproducible. Es una técnica fácilmente realizable, tanto a pacientes ambulatorios como encamados. Diversos estudios han constatad, que en condiciones de normalidad, los resultados de la bioimpedanciometría se correlacionan bien con las determinaciones realizadas mediante RM^22. -­‐ Cantidad total o parcial de potasio por tejido blando sin grasa Método clásico, seguro y económico de estimación de la masa de músculo esquelético basada en que dicho tejido contiene más del 50% de la reserva de potasio corporal total^23. -­‐ Medidas antropométricas Diversos estudios han podido correlacionar la circunferencia de la pantorrilla con la masa muscular. Una circunferencia de la pantorrilla inferior a 31 cm se ha asociado a presencia de discapacidad^24. Sin embargo, existen pocos estudios en los que se hayan validado las medidas antropométricas en pacientes con edad avanzada u obesos.

2.5.3 Rendimiento físico

Existe una amplia gama de pruebas para evaluar el rendimiento físico, entre ellas, la Batería Breve de Rendimiento Físico (SPPB), la velocidad de la marcha habitual, la prueba de deambulación 6 minutos y la prueba de potencia de subida de escalones. -­‐ Serie corta de rendimiento físico (SPPB) Evalúa el equilibrio, la marcha, la fuerza y la resistencia mediante un examen que consta de varias evaluaciones de capacidad: mantenerse en pie con los pies juntos, en semitandem y en tándem, el tiempo que tarda en recorrer andando 2,4 metros y el tiempo que tarda en levantarse de una silla y volver a sentarse cinco veces^28. Ha sido recomendada recientemente por un grupo de trabajo internacional para uso como criterio de valoración funcional en ensayos clínicos con personas de edad avanzada y frágiles^29. Por tanto, la escala SPPB puede ser utilizada como medida de referencia en investigación y en la práctica clínica. -­‐ Velocidad de la marcha Los primeros que pudieron constatar una relación no lineal entre la fuerza de las piernas y la velocidad de la marcha fueron Buchner y cols. Esta relación justificaba cómo pequeños cambios en la capacidad fisiológica puede tener un importante impacto en el rendimiento físico de los adultos frágiles^30. Ya sea aisladamente o integrada en la batería SPPB, esta medida puede ser utilizada tanto en el ámbito clínico como en investigación. -­‐ Test de levantarse y andar (TGUG) Mide el tiempo necesario para completar una serie de tareas importantes desde el punto de vista funcional: exige que el sujeto se levante de una silla, camine una distancia corta, se de la vuelta, regrese y se siente de nuevo. Es un método de evaluación del equilibrio dinámico muy utilizada en geriatría y puede servir como medición del rendimiento físico^31. -­‐ Test de capacidad de subir escaleras (SCPT) Ha sido propuesto como medida cínicamente pertinente del deterioro en la potencia de las piernas. Sus resultados son coherentes con los de técnicas más complejas para determinar la potencia física en las piernas y el rendimiento físico global. Puede ser útil en ciertos contextos de investigación^32.

4. OBJETIVOS

OBJETIVO PRINCIPAL

  1. Valorar la prevalencia de sarcopenia una población de pacientes crónicos hospitalizados en unidad hospitalaria de media-­‐larga estancia. OBJETIVOS SECUNDARIOS
  2. Evaluar la posible relación entre la sarcopenia y las características clínicas de los pacientes en términos de comorbilidad, capacidad funcional y deterioro cognitivo.
  3. Valorar la posible relación entre la presencia de sarcopenia y los estados de desnutrición.
  4. Estudiar la posible relación entre la presencia de sarcopenia y la disfagia orofaringea.
  5. Observar la posible relación entre la presencia de sarcopenia y las complicaciones intrahospitalarias (infección nosocomial y ulceras por presión).

5. MATERIAL Y MÉTODOS

5.1 Tipo de diseño Estudio descriptivo, transversal y observacional en el cual se evaluará a un grupo de pacientes crónicos ingresados en la Unidad de Media-­‐Larga Estancia del Hospital La Fe de Valencia. 5.2 Criterios de inclusión y de exclusión Se incluirán pacientes mayores de 18 años independientemente del motivo de ingreso y de la procedencia (unidades médicas, quirúrgicas, intensivos…) y se excluirán aquellos pacientes con deterioro cognitivo severo sin cuidador cualificado o con barrera idiomática que imposibilite la realización de la entrevista clínica. También se excluirán aquellos pacientes que se encuentren en una situación clínica de agonía. 5.3 Cálculo del tamaño de la muestra La estimación de la muestra necesaria se ha realizado considerando una prevalencia esperada en estudios realizados mediante bioimpedanciometría en paciente anciano del 17%^15 , asumiendo un 5% de error y un intervalo de confianza del 95%. Siguiendo estos criterios será necesario incluir un total de 205 pacientes en el estudio para obtener los datos esperados.

La evaluación del rendimiento físico será, sin lugar a dudas, la más dificultosa dado el previsible elevado grado de discapacidad en nuestra población de pacientes. Se utilizará la serie corta de rendimiento físico (SPPB). La puntuación del SPPB es la suma de tres pruebas: equilibrio monopodal, velocidad de la marcha en 4 metros y la prueba de levantarse y andar (TUAG). Cada prueba tiene el mismo peso, con puntuaciones entre 0 y 4; cuartiles generados a partir del estudio EPESE^33. Se considerará un rendimiento físico disminuido una puntuación inferior a 8 en el SPPB o una imposibilidad en su realización. Por otra parte, el equipo de enfermería realizará una valoración antropométrica, y un estudio de disfagia a cada paciente. La valoración antropométrica consistirá en la medición del peso y talla, del IMC, la circunferencia braquial y el espesor del pliegue cutaneo tricipital. Las mediciones se realizarán por triplicado obteniendo posteriormente la media. El peso se determinará mediante una báscula adecuadamente calibrada y la talla con un tallímetro incorporado a la misma. En aquellos pacientes en que operativamente sea imposible la medición a consecuencia del encamamiento se utilizarán técnicas de estimación de peso y talla basadas en la longitud total de brazo. La circunferencia del antebrazo se medirá con una cinta métrica y el pliegue tricipital con un lipocalimeter. Finalmente, para la comparación de las medidas antropométricas se utilizarán las tablas de Alastrué^34 ya que son las que sirven de referencia para los estudios realizados en el ámbito nacional. Para la valoración de la disfagia oro-­‐faringea se realizará un test de volumen-­‐ viscosidad (v/v). 5.4.1 VariablesSEXO: varón / mujer − EDAD: cuantitativa (años) − SERVICIO PROCEDENCIA: Unidad Corta Estancia: 1 Medicina Interna: 2 Oncología Médica: 3 Neurología: 4 Neurocirugía: 5 Cirugía General: 6 Traumatología: 7 Neumología: 8 Digestivo: 9 UHD: 10 Cirugía Vascular: 11 Otros: 12

MOTIVO INGRESO: Insuficiencia cardiaca: 1 Cardiopatía isquémica: 2 Insuficiencia renal aguda o crónica agudizada: 3 EPOC o neumopatía crónica agudizada: 4 Hepatopatía crónica/cirrosis: 5 Enfermedad vascular cerebral (isquemica/hemorragica): 6 TCE severo: 7 Deterioro cognitivo severo/sd. Confusional: 8 Neoplasias sólidas: 9 Neoplasias hematológicas: 10 Fractura de cadera o enfermedad osteoarticular discapacitante: 11 Sepsis de cualquier origen: 12 Hemorragias digestiva: 13 Otros: 14 − DIAS ESTANCIA: cuantitativa (nº días totales ingresado) VARIABLES DE VALORACIÓN MÉDICAPFEIFFER: sin deterioro mental/ deterioro mental leve-­‐moderado/ dm grave − CHARLSON: sin comorbidad / baja comorbilidad / alta comorbilidad − BARTHEL: sin dependencia / Leve / Moderada / Severa / Total − MNA: Normonutrido / Riesgo Malnutrición / Malnutrición − TEST VOLUMEN-­‐VISCOSIDAD: disfagia / no disfagia − SIGNOS DESNUTRICIÓN: -­‐ Edema miembros: SI / NO -­‐ Edema declive: SI / NO -­‐ Ascitis: SI / NO -­‐ Escara por presión (mayor de grado 1): SI / NO -­‐ Infección respiratoria SI / NO -­‐ Infección urinaria SI/ NO -­‐ Infección por cateter SI / NO -­‐ Sepsis / Bacteriemia SI / NO − PROTEINAS TOTALES: cuantitativa ( mg/dl ) − ALBÚMINA: cuantitativa ( mg/dl) − COLESTEROL TOTAL: cuantitativa (mg/dl) − LINFOCITOS: cuantitativa ( x10^3 /UL)

Gráfico 1

6. RESULTADOS Tras realizar el análisis descriptivo inicial podemos llevar a cabo una aproximación sobre las características de nuestra población a estudio (tabla 4): analizamos un total de 205 individuos. La edad media de nuestros pacientes fue elevada: 77,75 años (desviación estándar (DE) +/-­‐ 11,6), siendo el 54,5% de ellos varones. El principal motivo de ingreso en nuestra unidad fueron los accidentes vasculares cerebrales (18,4%), siendo el EPOC agudizado la segunda causa en frecuencia (17,9%), y la sepsis de cualquier origen la tercera (11,9%). La mayor parte de pacientes ingresaron procedentes de la Unidad de Corta Estancia (28,2%), seguido del servicio de neurología (16,3%) y del servicio de Medicina Interna (8,9%). Con todo, la estancia media hospitalaria de nuestros pacientes fue de 19,52 días (DE +/-­‐ 13,23). Con respecto a la comorbilidad del índice de Charlson en nuestra población fue de un 2,11 (DE +/-­‐ 1,2), presentando un 36% de los pacientes una comorbilidad elevada y un 27% una comorbilidad media. Con respecto al grado de dependencia, la media del índice de Barthel en nuestra población fue de 26,7 (DE +/-­‐ 27,98). El 70,6% de los individuos tenían un grado de dependencia grave para las actividades básicas de la vida diaria. En lo referente al nivel cognitivo, la media del índice de Pfeiffer de nuestra población fue de 4,22 (DE +/-­‐ 3,56), presentando un 40,3% un deterioro cognitivo moderado-­‐grave. Ingreso( Agónicos( Reparto( MED( ENF( RHB( Mail( CI( DATOS( ESCALAS( CI( ANTROPOMETRIA( EAT?10,(V/V( BUCODENTAL( FUERZA((Din)( MASA((Imp)( RENDIMIENTO( Base( Datos( Recogida( Análisis( IdenLficación( NoLficación( Documentación( Homogeneizar(( Agilizar( Recogida( Registro( Equipo(Coordinación(

Con respecto a las características antropométricas, el peso estimado medio de nuestros pacientes fue de 50,4 Kg (DE +/-­‐ 15,9) y la talla media fue de 155,7 cm (DE +/-­‐ 7). Por otra parte, el IMC medio fue de 20,85 (DE +/-­‐ 6,45), el 40,6% de ellos presentaron un IMC < 18,5, y por tanto podríamos clasificarlos como de bajo peso. La media del pliegue tricipital fue de 13,9 mm (DE +/-­‐ 6,51) incluyéndose entre el percentil 50 y 90 en varones y entre el percentil 10 y 50 en mujeres según las tablas de Alastrué. La media de la circunferencia del brazo fue de 26,5 cm (DE +/-­‐ 4,9), incluyéndose entre los percentiles 50 y 90 tanto en varones como en mujeres. Por otra parte se realizó la valoración sobre la existencia de sarcopenia, objetivando su presencia en el 76,4% de los casos (157 pacientes), constatando en el 91% de los casos un grado de sarcopenia grave, es decir, cumplían 3 de los 3 criterios clasificatorios requeridos por el consenso (masa muscular baja, fuerza física baja y rendimiento físico disminuido). Entre los hombres, el 75,9% fueron sarcopénicos y entre las mujeres el 77,1%. Con respecto a las complicaciones, destaca la elevada prevalencia de desnutrición: 66,3% del total de nuestros pacientes según el test de screening MNA (134 pacientes) y un 44,6% de los pacientes estaban afectados de disfagia orofaríngea según el test de volumen-­‐ viscosidad (95 pacientes). Por otra parte, se constató la presencia de úlceras por presión en sacro u otras localizaciones en un 23,7% de los casos (51 pacientes) y un 23,8% de pacientes presentaron alguna infección nosocomial (48 pacientes), de los cuales 26 de ellos presentaron una infección respiratoria (54,1%), 21 pacientes una infección urinaria (43,75%), 3 pacientes una sepsis sin foco claro (6,25%) y tan solo un paciente presentó una infección por catéter. Con respecto al análisis comparativo (tabla 5), se observó una clara diferencia con respecto a la edad (p 0,004), siendo significativamente mayor en el grupo de pacientes con sarcopenia (media 79,17 años) con respecto a los no sarcopénicos (72,7 años). Pero donde mayores diferencias estadísticamente significativas se evidenciaron fue en los aspectos antropométricos: en el grupo de pacientes afectados de sarcopenia el IMC fue significativamente inferior(20,5), en comparación a los pacientes no sarcopénicos (IMC 24,4) siendo la p 0,002. También se evidenció una diferencia estadísticamente significativa en el peso estimado (p 0,003), siendo la media de 49,4 Kg en el grupo de pacientes sarcopénicos y de 59,2 Kg en la de no sarcopénicos. También en la circunferencia braquial (p<0,005) en los pacientes sarcopénicos (26,2 cm) y los no sarcopénicos (29,5 cm). Curiosamente, no se constataron diferencias en la presencia de desnutrición entre la población de pacientes sarcopénicos (69,2% desnutridos) y no sarcopénicos (56,8% desnutridos). También se encontraron diferencias en la presencia de disfagia orofaringea (p 0,023), mayor en la población de sarcopénicos (53,8% v/v patológico) en comparación con el grupo sin sarcopenia (32,4% v/v patológico). No se encontraron diferencias estadísticamente significativas en ninguna de los parámetros analíticos, tampoco en la aparición de complicaciones infecciosas nosocomiales ni en la aparición de ulceras por presión.