Docsity
Docsity

Prepara tus exámenes
Prepara tus exámenes

Prepara tus exámenes y mejora tus resultados gracias a la gran cantidad de recursos disponibles en Docsity


Consigue puntos base para descargar
Consigue puntos base para descargar

Gana puntos ayudando a otros estudiantes o consíguelos activando un Plan Premium


Orientación Universidad
Orientación Universidad

apuntes y resumenes de la universidad, Resúmenes de Derecho

apuntes y resumenes de la universidad

Tipo: Resúmenes

2022/2023

Subido el 18/10/2022

la-verdad-hablada
la-verdad-hablada 🇩🇴

10 documentos

1 / 12

Toggle sidebar

Esta página no es visible en la vista previa

¡No te pierdas las partes importantes!

bg1
Tema# 5 desarrollo de la personalidad y socialización en la infancia
El niño nace en un ambiente rico en expectativas, valores, normas y tradiciones.
Todo ello, junto con otras circunstancias, contribuirá a moldear su personalidad:
creencia, actitudes y formas especiales de interactuar con la gente. Desde un
punto de vista diferente, se le socializa durante los dos primeros años de vida:
empieza a aprender y a asimilar normas sociales de conducta, leyes, reglas y
valores, tanto escritos como no escritos.
Más tarde aprenderá a vivir con las contradicciones e hipocresías de la sociedad.
Por otra parte a medida que crece, ayuda a moldear su propia personalidad:
acepta o rechaza de manera activa las reglas y las normas, en lugar de ser
receptor pasivo de la socialización.Los recién nacidos no tiene conciencia de sus
relaciones con las personas que lo rodean. al nacer no distinguen entre el yo y los
otros, entre varón y mujer ni entre niño y adulto. Tampoco se forman expectativas
respecto de la conducta ajena: las cosas simplemente suceden o no. en otras
palabras, en un principio viven en el presente y todo lo que no se halla al alcance
de su vista está fuera de la mente.
En los dos primeros años de vida se operan cambios drásticos. el recién nacido
empieza a percatarse del ambiente y de la forma en que interactúa con él, de la
sensibilidad o insensibilidad del mundo que lo rodea y de que puede hacer
algunas cosas por mismo o conseguir ayuda en caso necesario.Cuando
empieza a caminar, cobra mayor conciencia de las relaciones familiares y de lo
que es bueno o malo. Se da cuenta de que es hombre o mujer y empieza a
aprender como el género impone ciertos estilos de conducta en la persona.
Sin embargo, los recién nacidos no están desprovistos de un temperamento.
Llegan al mundo con cierto estilo de conducta que, tomando en conjunto,
constituyen el temperamento. Algunos son más sensible a la luz o los sonido
fuerte y repentinos. Otros reacciona de manera más rápida e intensa al malestar y
otros más son exigentes, placidos, activos y vigorosos.
pf3
pf4
pf5
pf8
pf9
pfa

Vista previa parcial del texto

¡Descarga apuntes y resumenes de la universidad y más Resúmenes en PDF de Derecho solo en Docsity!

Tema# 5 desarrollo de la personalidad y socialización en la infancia

El niño nace en un ambiente rico en expectativas, valores, normas y tradiciones. Todo ello, junto con otras circunstancias, contribuirá a moldear su personalidad: creencia, actitudes y formas especiales de interactuar con la gente. Desde un punto de vista diferente, se le socializa durante los dos primeros años de vida: empieza a aprender y a asimilar normas sociales de conducta, leyes, reglas y valores, tanto escritos como no escritos.

Más tarde aprenderá a vivir con las contradicciones e hipocresías de la sociedad. Por otra parte a medida que crece, ayuda a moldear su propia personalidad: acepta o rechaza de manera activa las reglas y las normas, en lugar de ser receptor pasivo de la socialización.Los recién nacidos no tiene conciencia de sus relaciones con las personas que lo rodean. al nacer no distinguen entre el yo y los otros, entre varón y mujer ni entre niño y adulto. Tampoco se forman expectativas respecto de la conducta ajena: las cosas simplemente suceden o no. en otras palabras, en un principio viven en el presente y todo lo que no se halla al alcance de su vista está fuera de la mente.

En los dos primeros años de vida se operan cambios drásticos. el recién nacido empieza a percatarse del ambiente y de la forma en que interactúa con él, de la sensibilidad o insensibilidad del mundo que lo rodea y de que puede hacer algunas cosas por sí mismo o conseguir ayuda en caso necesario.Cuando empieza a caminar, cobra mayor conciencia de las relaciones familiares y de lo que es bueno o malo. Se da cuenta de que es hombre o mujer y empieza a aprender como el género impone ciertos estilos de conducta en la persona.

Sin embargo, los recién nacidos no están desprovistos de un temperamento. Llegan al mundo con cierto estilo de conducta que, tomando en conjunto, constituyen el temperamento. Algunos son más sensible a la luz o los sonido fuerte y repentinos. Otros reacciona de manera más rápida e intensa al malestar y otros más son exigentes, placidos, activos y vigorosos.

Desarrollo social y emocional en la infancia. En la vida, el individuo participa en varias e importante relaciones interpersonales. la primera, sin duda la de mayor influencia se da con la madre y con otras personas que lo atienden (denominados cuidadores primarios) la relación suele establecerse con firmeza a los ocho o nueve meses. Desde mediados de la década del 1960, los psicólogo se han servido de termino apego para designar la primera relación que se caracteriza por interdependencia, sentimiento mutuos intenso y fuerte vinculo emocionales.

Primera relaciones Los niños pasan por fases de crecimiento emocional y social que culminan en el establecimiento de sus primeras relaciones. Aunque los estados emotivos del recién nacido son pocos y consisten principalmente en malestar y en un interés relajado, pronto aparece una amplia gama de emociones orientadas al yo: tristeza, ira, repugnancia y placer. Esta se ve favorecida y adquieren significa do dentro del con texto de las relaciones. Más adelante, sobre todo en el segundo año, surgen las emociones de índoles social, orgullo, vergüenza, desconcierto, culpa y empatía a medida que el pequeño se conoce mejora sí mismo y a los otros.

El Proceso De Apego Mary Ainsworth (1983) define este tipo de conductas como aquellas que favorecen ante todo la cercanía con una persona determinada. Entre estos comportamientos figuran los siguientes: señales (llanto), orientación (mirada), movimientos relacionados con otra persona (aproximarse), e intentos activos de contacto físicos (abrazar). El apego es mutuo y recíproco y consiste en compartir experiencias de forma cooperativa. Ainsworth y sus colegas (1979) han descubierto que el apego mutuo puede no darse cuando a un niño le molesta que lo toquen o presenta una discapacidad como la ceguera. Por tanto el niño y el cuidador deben aportar conductas que favorezcan el pego. Los comportamientos del primero invitan a respuestas afectuosas del segundo. Las acciones del niño hacen que el cuidador

Tema# 6 el preescolar: desarrollo físico, cognoscitivo y lingüístico

Hay una enorme distancia por recorrer entre los 2 y 6 años en la adquisición de los procesos de pensamiento indispensables para la instrucción formal. Los niños se convierten poco a poco en personas realistas que forman conceptos y muestran competencia lingüística. Aprenden el lenguaje para comunicar sus necesidades, ideas y sentimientos. De manera rápida en interacción con los desarrollos cognoscitivos y social.

A medida que aprende la sintaxis y el vocabulario, asimila los valores sociales culturalmente apropiados: urbanidad, obediencia t roles de género. Los progresos en el pensamiento, el lenguaje y las habilidades motoras están interrelacionados. A medida que adquieren fuerza física y destrezas, se sienten motivados para aplicar las habilidades que va dominando a la exploración y el aprendizaje. Las formas en las que el niño se comporta y piensa constituyen un sistema integrado. Desarrollo físico y motor El desarrollo del cerebro da origen a habilidades más complejas y refinadas de aprendizaje, así como al perfeccionamiento de las habilidades motoras gruesas y finas. Tamaño y proporciones corporales.

El crecimiento físico del individuo es resultado de la genética, la alimentación y las oportunidades de jugar y hacer ejercicio. La relación entre alimentación y crecimiento se manifiesta en las diferencias entre los niños que viven en países industrializados y en naciones pobres. Una privación prologada de nutrientes esenciales ocasiona efectos importantes en el desarrollo físico y motor. Los periodos prolongados de desnutrición durante la niñez temprana limitan directa e indirectamente el desarrollo cognoscitivo.

No se trata de simple desnutrición, pues se presenta primero una condición de daño cerebral y luego de retraso del desarrollo cognoscitivo; daño cerebral que algunas veces es reversible y otras no. La desnutrición retrasa el crecimiento físico y la adquisición de habilidades motoras; a su vez, esto aminora las expectativas de los padres y contribuye al retraso del desarrollo cognoscitivo. Proporciones corporales.

A lo largo de la niñez las proporciones corporales cambian. De los dos a los seis años, la tasa del crecimiento es más lenta en comparación con la de los dos primeros años de vida. Como ocurre con otros aspectos del crecimiento, los niños presentan tasas y aumentos muy variables de crecimiento en la etapa preescolar, y los padres no deben intentar acelerarlo sobrealimentando ni obligándolos a hacer demasiado ejercicio.

El centro de gravedad en los niños de corta edad está por encima del de los adultos, en la parte superior del cuerpo, este centro de gravedad va descendiendo al área pélvica conforme va modificándose las proporciones corporales. Maduración esquelética. Los huesos se desarrollan y endurecen por medio de la osificación (tejido blando o cartílago se transforma en hueso). La edad esquelética de la madurez de los huesos se mide con radiografías de los huesos de la muñeca.

Desarrollo de las habilidades motoras Las habilidades motoras del niño mejoran durante el periodo preescolar. Los cambios se concentran en las habilidades motoras gruesas, en cambio las finas se desarrollan con mayor lentitud. Sin embargo resulta difícil distinguir el desarrollo motor-perceptual del cognoscitivo global. Casi todo lo que hace el niño en los primeros años supone una interacción entre éstos, juntos con el desarrollo social y emocional. Aunque gran parte de lo que hace perece ser una exploración sensorial, sus acciones suelen ser propositivas y estar encaminadas a metas. Algunas secuencias del desarrollo comprenden lo que se conoce como subordinación funcional, integración de varias acciones o esquemas simples a un patrón de conductas más complejo. Habilidades motoras gruesas.

Los niños de dos años son competentes, aunque les queda un camino por recorrer. Su conducta motora gruesa empieza a dar señales de automaticidad (realizar conductas motoras bien practicadas sin tener que pensar en ellas) La actividad global alcanza su punto más elevado entre los dos y los tres años y disminuye en forma gradual durante el resto del periodo preescolar, primero en las niñas. Habilidades motoras finas. Exigen el uso coordinado y diestro de la mano,

Tema #7 el preescolar: desarrollo de la personalidad y socialización

El periodo preescolar es una época en que se acelera el ritmo de aprendizaje del niño respecto de su mundo social. En teoría, aprende lo que constituye una conducta buena o mala; a controlar sus sentimientos, sus necesidades y deseos en formas socialmente aceptables; y lo que la familia, la comunidad y la sociedad esperan de él. Comienza a asimilar normas, reglas y costumbres de su cultura. Al mismo tiempo aprende un autoconcepto profundo y, quizá, duradero.

En condiciones normales, el autocontrol y la competencia social del niño mejoran muchísimo entre los dos y los seis años de edad. A los dos años tiene todas las emociones básicas de un niño de seis años (y de un adulto), pero las expresa de manera diferente. Durante la etapa terrible de los dos años de edad, puede ser en verdad difícil (a menudo sin proponérselo), pero con frecuencia es encantador y muy afectuoso. Sin embargo, predomina la gratificación inmediata; cuando no la consigue, manifiesta su malestar con berrinches terribles. Si una madre le promete a su hijo de dos años un cono de helado, el niño lo querrá ahora, no después que ella termine de charlar con una amiga a quien encuentra por casualidad frente a la tienda.

También las expresiones de dependencia son directas y físicas. En un ambiente desconocido, un niño de dos años permanece cerca de su madre o de su padre, quizás aferrándose a ellos. Si se aleja un poco, a menudo regresa usando al progenitor como “base segura”. Si se le obliga a separarse de él, puede arrojarse al piso o dar gritos en protesta. La ira se manifiesta especialmente en formas físicas. El niño de dos años no la expresa de manera verbal, sino mediante patadas y mordiscos. Por el contrario, a los seis años los niños son más verbales y reflexivos; también se enojan menos y se controlan mejor. Enfrentan la ira y la frustración en formas más diversas. Por ejemplo, pueden desahogar su enojo pateando una puerta o un oso de peluche, en lugar de darle un puntapié en la espinilla al hermano, la hermana o el padre. Hay algunos que reprimen el enojo y no lo manifiestan en absoluto. Otros asumen una postura asertiva para defender

sus derechos, o en su imaginación se ven a sí mismos superando situaciones desagradable.

Revisión de tres teorías

La socialización durante el periodo preescolar es compleja; no debe, pues, sorprendernos que los expertos discrepen respecto de las principales influencias y sobre las interacciones decisivas que tienen lugar, lo mismo que respecto de la manera de estudiarlas. Hay tres aproximaciones teóricas que rigen gran parte de la investigación contemporánea de la socialización que se realiza en estos años. Como veremos, las tres tienen bondades y limitaciones.

Las teorías psicodinámicas ponen de relieve los sentimientos del niño, sus pulsiones y los conflictos de su desarrollo. Freud insistió en que el preescolar debe aprender a afrontar las intensas emociones innatas en formas que sean aceptables para la sociedad. Erikson destacó el crecimiento de la autonomía y la necesidad de conciliarla con la dependencia respecto de los padres durante esta etapa. Por su parte, las teorías del aprendizaje social recalcan los nexos entre cognición, conducta y ambiente.

La conducta del niño es moldeada no sólo por las recompensas y los castigos externos, sino también por los modelos de los roles. Las recompensas también pueden ser internas: los niños se comportan en formas que mejoran la autoestima, el orgullo y el sentido de logro. Por último, las teorías del desarrollo cognoscitivo se centran en los pensamientos y en los conceptos como organizadores de la conducta social. El preescolar adquiere conceptos de creciente complejidad; aprende lo que significa ser niña o niño, hermano o hermana. Aprende asimismo a ajustar su conducta a los esquemas de género aceptados: juzga cuáles son adecuadas al hombre o a la mujer. Cada planteamiento ha dado origen a importantes teorías y conclusiones sobre la socialización y el desarrollo de la personalidad, como veremos en las siguientes secciones.

Tema #8 niñez media y niños en edad escolar: desarrollo físico y cognoscitivo

La niñez media, edad que abarca de los seis a los 12 años, es un periodo interesante para aprender y perfeccionar varias habilidades, desde la lectura, la escritura y las matemáticas hasta jugar básquetbol, bailar y patinar sobre ruedas. El niño se concentra en probarse a sí mismo, en superar sus propios retos y los que el mundo le impone. Si tiene éxito, será una persona capaz y segura de sí misma; si fracasa, puede experimentar sentimientos de inferioridad o tener un sentido débil del yo. Para Erikson es un periodo de laboriosidad, palabra que capta el espíritu de la edad, pues proviene de un término latino que significa “construir”. En este capítulo veremos cómo adquiere el niño competencias físicas y cognoscitivas. También examinaremos los problemas escolares y de desarrollo que caracterizan la niñez media, incluidas las técnicas con que se mide el desarrollo académico e intelectual, así como los enfoques modernos aplicados al conocimiento de los problemas de aprendizaje y el retraso mental. Conviene recordar que los factores físicos, cognoscitivos y psicosociales se combinan para producir el desarrollo individual. En parte porque mejora el funcionamiento neurológico (gracias a la mielinización de la formación reticular), el niño concentra la atención durante más tiempo. Y como perfecciona sus habilidades cognoscitivas, puede prever las acciones de los demás y planear estrategias. Éstos y otros retos influyen en la elección de actividades, lo mismo que en sus éxitos o fracasos.

Desarrollo físico y motor

Durante la etapa de la escuela primaria, el niño perfecciona sus habilidades motoras y se vuelve más independiente. Si recibe oportunidades o entrenamiento idóneos, aprende a andar en bicicleta, saltar la cuerda, nadar, bailar, escribir o tocar un instrumento musical. Con deportes de grupo como el futbol soccer, el beisbol y el básquetbol mejoran la coordinación y las habilidades físicas.

Crecimiento y cambios físicos

El crecimiento es más lento y estable durante la niñez media que en los dos primeros años de vida. El niño normal de seis años pesa 20.4 kg y mide poco más de un metro. El crecimiento gradual y regular prosigue hasta los nueve años en las niñas y hasta los 11 años en los varones; a partir de ese momento comienza el “estirón del adolescente” (vea el capítulo 10). En la figura 8 -1 se muestran esquemáticamente los cambios de tamaño y las proporciones corporales que caracterizan la niñez media.

Sin embargo, adviértase que hay una gran variabilidad en el tiempo del crecimiento; no todos los niños maduran con la misma rapidez. Intervienen de manera conjunta el nivel de actividad, el ejercicio, la alimentación, los factores genéticos y el sexo. Por ejemplo, las niñas suelen ser un poco más pequeñas y pesar menos que los niños hasta los nueve años; después, su crecimiento se acelera porque el estirón del crecimiento comienza antes en ellas. Además, algunos niños y niñas son estructuralmente más pequeños. Tales diferencias pueden incidir en la imagen corporal y en el autoconcepto, de manera que son otra forma en que interactúan los desarrollos físico, social y cognoscitivo.

Cambios internos

Maduración del esqueleto La longitud de los huesos aumenta a medida que el cuerpo se alarga y se ensancha. Los episodios de rigidez y dolor ocasionados por el crecimiento del esqueleto son muy comunes por la noche. Los niños que crecen rápidamente sufren este tipo de dolores a los cuatro años; otros no los padecen sino hasta la adolescencia. En ambos sexos aumentan la longitud, el grosor y el ancho de los músculos (Nichols, 1990). La fuerza de varones y mujeres es similar durante la niñez media. Desarrollo del cerebro Entre los seis y ocho años, el prosencéfalo pasa por un crecimiento rápido temporal; a los ocho años tiene 90 por ciento de su tamaño adulto.

El desarrollo del cerebro en este periodo produce un funcionamiento más eficaz, sobre todo en los lóbulos frontales de la corteza, que tienen una participación